divendres, de desembre 08, 2006



VIH/SIDA: Una crisis mundial
"El SIDA es una crisis de carácter excepcional: es a la vez una emergencia y una cuestión de desarrollo a largo plazo. A pesar del aumento de la financiación, el compromiso político y los progresos realizados en la ampliación del acceso al tratamiento, la epidemia del SIDA sigue adelantándose a la respuesta mundial. No hay ninguna región del mundo a salvo. La epidemia mantiene su gran dinamismo, su crecimiento y su carácter cambiante.
Impacto del VIH/SIDA
"En todos los países afectados, con niveles de prevalencia del VIH tanto altos como bajos, el SIDA obstaculiza el desarrollo imponiendo una carga devastadora sobre los individuos y las familias. En los países mas castigados, está liquidando decenios de progresos sanitarios, económicos y sociales: reduce en varios años la esperanza de vida, agrava la pobreza y contribuye a empeorar la escasez de alimentos."

La Comunidad Internacional sabe lo que hay que hacer, cómo hacerlo, quién lo puede hacer, dónde hay que trabajar y cuánto cuesta, sólo falta la voluntad de hacerlo.
Se están dando pasos adelante, sin embargo queda mucho por andar y por resolver algunas cuestiones vitales: Contar con una vacuna preventiva, que los Gobiernos aumenten los fondos y que se adquieran compromisos estables para desarrollar estrategias que permitan avanzar en la prevención, el tratamiento y la reducción de impacto y vulnerabilidades de las países y colectivos más afectados.
Los expertos apuntan que a pesar de la dificultad científica que entraña la naturaleza del virus, las barreras principales son los intereses comerciales de la industria farmacéutica, la insuficiencia de los recursos aplicados (sólo 3% de la inversión en SIDA) mientras que en productos de belleza invierten mucho más, esto hace que en los paises del tercer mundo, tengan que partir en 4 la dosis de adulto para darsela a un niño, con lo que el tratamiento no és el adecuado.
Si bajasemos del limbo, y priorizasemos las necesidades mundiales, esta ocuparía junto con la pobreza y el hambre, de las primeras en la lista. Señores quienes sean, ¿que estamos haciendo?De verdad es todo tan importante, las armas, las guerras, el poder por el petroleo, el poder en general, como para no darnos cuenta, de que está pasando? Tenemos miedo a embejecer con demasiadas arrugas, pero por lo visto, no tenemos miedo de morir a cualquier edad, siempre que nuestra imagen personal sea la que está de moda.